Novelas románticas y videojuegos

Novelas románticas y videojuegos

…los insultos que se escuchan con frecuencia sobre el género: es anti-feminista, presenta demasiadas mujeres que necesitan escapar de relaciones abusivas, todos los libros son iguales, es pornografía para mujeres, no es realista, es inconsistente y no puede tomarse en serio si a la mitad de de la población no le importa -Valerie Taylor

¿Nos suena familiar? Aunque Taylor cita las acusaciones más repetidas sobre las novelas románticas, la frase evoca buena parte de las críticas que también han sufrido los videojuegos. El paralelismo viene dado por la esencia escapista que comparten y por el hecho de que se trata de formas de entretenimiento en el que las obras se realizan por un género para ese mismo género. Las novelas románticas constituyen un sector mayoritariamente escrito por mujeres y para mujeres, mientras que los videojuegos se hacen generalmente por hombres y para hombres. En ambos casos, esta exclusividad, unido a su naturaleza escapista, ha resultado fatal para su reputación. Veamos algunos ejemplos:

[Los videojuegos] están hechos por hombres y para los hombres, reforzando el comportamiento y papel masculino e incluso, en ocasiones, con claras muestras de incitación al sexismo (…). Podemos decir que hay un sexismo explícito, centrado en la imagen y el rol de la mujer, y un sexismo implícito que hemos denominado la “cultura macho” -Enrique Javier Díez Gutiérrez

Después de todo, las novelas románticas han sido un género escrito por mujeres para mujeres, y [por ello] ha tenido que aguantar numerosas críticas, no sólo por parte de los críticos varones, sino también de mujeres que querían ser tomadas en serio por parte de estos críticos varones -Jayne Ann Krentz

Vamos a tratar la polémica generada por estas novelas a lo largo de la historia porque la similitud con la actual controversia en torno a los videojuegos es bastante reveladora. A continuación podrán leer una traducción selectiva del artículo “The Social Significance of the Romance Novel” (la importancia social de las novelas románticas):

Introducción

Los académicos han argüido que las novelas [románticas] se han dirigido a un publico formado por amas de casa aburridas y otras [mujeres] con una “limitada” formación cultural (…). Sería imposible para mí hacer una lista de los diversos comentarios desdeñosos y calumnias que se han pronunciado sobre las novelas románticas, porque serían demasiado numerosos (…).

El romance renacentista y sus lectoras

A inicios del siglo XVII las novelas románticas y sus escritoras se habían convertido en los temas favoritos de satiristas y moralistas. Las lectoras eran a menudo tachadas de necias por leer novelas románticas en lugar de textos considerados de mayor valor (…). Todos estos [textos] habrían sido mucho más fáciles de obtener para las mujeres, y no habrían causado tanta consternación entre los críticos (…).

La idea de las novelas románticas como género femenino es principalmente un constructo originado en las preocupaciones sobre los peligros que estas novelas representaban para las impresionables mentes de las mujeres de clase media (…). La premisa se basaba en la creencia de que las mujeres eran fácilmente influenciables y las novelas románticas promovían conductas poco restrictivas que podían incitar a una sexualidad rebelde (…).

La época Victoriana

En las últimas páginas de la obra Vindicación de los Derechos de la Mujer, de Mary Wollstonecraft, se critica a la ficción sentimental por alentar “una desviación romántica en la mente”, una visión falsa de la naturaleza humana, y por enseñar a las mujeres a articular “el lenguaje de la pasión en tonos artificiales”. Culpa a las novelas de desviar la atención de las mujeres de otros textos literarios dirigidos a desarrollar sus intelectos (…).

Los intentos de Wollstonecraft y otros para convencer al público de la importancia que debía otorgarse al efecto que las novelas románticas pudiera tener en las lectoras estaba anclado en la retórica política. Las actitudes renacentistas con respecto a los terribles efectos que estas novelas podían tener en sus lectoras continuaban coloreando las opiniones de los críticos victorianos.

Manuales de consejos, textos sobre piedad y guías para el cuidado de la casa eran entonces lecturas consideradas como aceptables para las mujeres. Obras más fantásticas eran ridiculizadas como mentalmente embrutecedoras y que debilitaban el buen juicio de las lectoras. Una mujer con interés en la lectura sugería una vulnerabilidad a la influencia del texto “sorda y ciega a todos los estímulos en su entorno inmediato”. También apuntaba a la potencial autonomía de su mente, evidenciada por su “postura autosuficiente” cuando leía una novela (…).

Aquí termino la traducción.

Muchas de estas críticas hacia las novelas románticas se han sostenido hasta el día de hoy, si bien es cierto que también hay académicos que recientemente han defendido el valor de este género literario.

Aunque la carga sexual de esta novelas era motivo de preocupación en el pasado, hoy día se encuentra mucho más vigente y podemos hallarla representada visualmente en las portadas de las mismas. Al igual que ocurre en determinados videojuegos, estas novelas ofrecen una imagen sexualizada del sexo opuesto que responde frecuentemente a las fantasías del público a quien va dirigido.

 

Como podemos ver, estas imágenes ponen de manifiesto la vertiente escapista del género, y al igual que muchos personajes femeninos del mundo de los videojuegos poseen unos pechos desorbitados, los héroes de estas novelas, cuando participan en un encuentro sexual, también resultan estar extraordinariamente dotados.

Hoy día estas novelas no se ven amenazadas por la censura directa, pero siguen expuestas a otros métodos indirectos:

Las novelas románticas son el único género que los bibliotecarios se sienten cómodos al censurar. De hecho, muchos bibliotecarios parecen verlo como una obligación social. Censuran las novelas románticas utilizando métodos directos: rehusar su compra y rehusar catalogarlas. Las censuran utilizando métodos indirectos: actitudes negativas y comentarios del personal -Shelley Mosley, John Charles y Julie Havirl

El estigma social de este tipo de publicaciones era tan fuerte que, como dijo Jayne Ann Krentz cuando las comparaba con las antiguas novelas de misterio “la gente culta evitaba ser vista leyéndolas en público”.

Ahora bien ¿podemos comparar la controversia de las novelas románticas con la actual polémica de los videojuegos? Vamos a comenzar por las diferencias.

La primera y más importante es que las novelas románticas conforman un género literario concreto, mientras que los elementos escapistas típicamente masculinos de los videojuegos (como los héroes musculosos y las mujeres sexualizadas y/o necesitadas de rescate, etc.) constituyen una tendencia general en la mayor parte de los títulos que implican personajes e historias, especialmente en los de mayor presupuesto. Si bien es cierto que la aclamación universal de títulos como Portal y el prometedor Mirror’s Edge parecen apuntar a un cambio de esta tendencia, todavía sigue siendo la predominante, y no afecta a uno sino a varios géneros: desde las chicas de Dead or Alive, pasando por el traje especial de Ashley en Resident Evil 4 (Game Cube), hasta los pechos de Lara Croft en Tomb Raider (que ahora están revirtiendo a un tamaño más normal), es fácil detectar los tópicos del escapismo masculino en juegos de casi cualquier género que involucren personajes.

En la literatura de ficción los varones pueden ignorar las novelas románticas y todavía disponen de un amplio abanico de posibilidades, pero para las mujeres no es tan fácil encontrar esas opciones dentro de los videojuegos porque los elementos del escapismo masculino salpican a la mayoría de los géneros, salvo que las jugadoras opten por videojuegos que no incluyan personajes (como los puzzles) o no muestren esa sensualidad femenina exagerada, como en los títulos infantiles o de estrategia. Al fin y al cabo, y me dirijo a los lectores varones heterosexuales ¿consideran que las portadas de las novelas que he mostrado hasta ahora les invitan a ustedes a leer? Del mismo modo, los exagerados modelos femeninos no invitan a las mujeres a jugar. Quizá viendo estas portadas podemos hacernos una idea de cómo se ve para muchos el mundo de los videojuegos desde fuera.

La segunda diferencia es el sector de la población sobre el que la sociedad muestra su preocupación. La polémica de las novelas románticas se originó por el temor a la influencia que podían ejercer sobre mujeres adultas, ya que se las consideraba fácilmente impresionables e influenciables por este tipo de textos. A día de hoy la visión de la mujer como un ser intelectualmente inferior al varón ya no se sostiene en el discurso de políticos y moralistas, pero este género literario continúa siendo despreciado por su percibida escasa calidad literaria e intelectual.

En el caso de los videojuegos, sin embargo, los críticos deploran su uso principalmente por parte de los niños. En este punto, aunque la mayoría de las acusaciones que recibe el sector son injustas, podemos entender que existe una preocupación razonable. El problema (y aquí es cuando empezamos con las similitudes) es que buena parte de los discursos moralistas incluyen a adolescentes e incluso a jóvenes adultos dentro de los grupos “impresionables”.

La adolescencia, tal y como la conocemos hoy día, es una construcción social casi exclusiva de las sociedades occidentales modernas. En la mayoría de las culturas no occidentales, así como en las occidentales en el pasado, la mayoría de edad se encuentra entre los catorce y los dieciséis años, adquiriendo derechos y responsabilidades adultas como casarse o portar armas, entre otras. Si en el caso de las novelas románticas la controversia se originó por la infantilización de las mujeres, buena parte de la polémica de los videojuegos está relacionada con la infantilización de adolescentes y jóvenes, a los que también se considera “impresionables”. En este sentido, del mismo modo que las mujeres de la época Victoriana desafiaban los límites impuestos por los moralistas de lo que se consideraba socialmente aceptable para ellas, adolescentes y jóvenes hacen lo propio por medio de los videojuegos, afirmando su autonomía.

El resto de similitudes son mucho más evidentes: tanto novelas románticas como videojuegos han sido condenados por fuerzas políticas de la izquierda y la derecha,  se han considerado un material que embrutece de la mente, se les ha acusado de provocar comportamientos mal vistos socialmente y de desviar a sus lectores/usuarios de materiales más edificantes. No sólo se escucha con frecuencia que los videojuegos nos distraen de la lectura, sino que también se habla de los videojuegos educativos como el único género que debería interesar a sus usuarios. En ambos casos, podemos concluir que la desaprobación social del escapismo, elemento frecuente en la ficción popular, es un elemento clave. Como dijo Jayne Ann Krentz “la cuestión es que el prejuicio contra las novelas románticas, aunque fuerte y virulento durante generaciones, en realidad no es más que una particularmente aguda extensión del prejuicio general de nuestra cultura contra toda la ficción popular”.

Podemos concluir, por tanto, que la polémica de los videojuegos no es un fenómeno sin precedentes. Cambian el medio y los sujetos, pero no el desprecio de los moralistas por la cultura popular, fuente de comportamientos antisociales y perniciosa distracción de la cultura de élite, la única relevante de acuerdo con sus parámetros.

Web del autor: Videojuegos y Sociedad

3 comentarios en «Novelas románticas y videojuegos»

  1. Esto es la historia de siempre, la opinion sobre las feministas me las reservo porque este no es el lugar pero respecto al uso de la mujer en los videojuegos dices una cosa que cualquier persona con dos dedos de frente lo sabe: Se ponen a chicas ligeras de ropa porque los videojuegos los consumimos hombres.
    La verdad que siempre he pensado que hay tanta mala fama porque hay que vender periodicos y porque algunas asociaciones que tienen que decir que existen.
    PD1: Respecto al pecho de lara croft, ahora me gusta más, no estan tan inflados.
    PD2: Vaya tela con el modelo de la Ashley… no la recordaba así en el juego O-O
    PD3: Me gusta los pechos grandes pero en los videojuegos muchas veces los ponen horrendos.

  2. Síiii Kaiser-77
    Verás que recien me descargo el Magical Drops 3 y 2 para MAME y desde que me escogí a (W)orld n he dejado de pensar en ella y más cuando celebra su victoria.

    Y qué deicr de Bayonette, Samus Aran. Espero que acabende sacar el DOA: Paradise

  3. De la bayonette he escuchado que han sacado comics hentai y que la empresa estaba que trinaba…
    Lo del DOA es otro mundo, no se si será oficial pero he visto rulando de todo porno/erotico. Aunque este juego y con su vestimenta se presta «a eso». La vestimenta y sacar el juego de volleyball no buscaba otro fin…

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